La obligatoriedad de utilizar la señal luminosa V16 conectada desde el 1 de julio de 2024 ha mejorado la seguridad vial en España al permitir que los servicios de tráfico y otros conductores localicen vehículos inmovilizados en tiempo real. Sin embargo, una preocupación creciente entre expertos en privacidad y usuarios cuestiona: ¿geolocalizan estas balizas aunque no estén encendidas?
Según advierte la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), cualquier dispositivo que recopile datos de geolocalización debe hacerlo únicamente cuando sea estrictamente necesario y con el consentimiento informado del usuario. En su nota informativa de 2023, la AEPD dejó claro que la geolocalización constante —incluyendo cuando la señal V16 está apagada o guardada en el coche— carece de base legal bajo el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), salvo que el usuario haya dado su consentimiento explícito.
Aunque la Dirección General de Tráfico (DGT) exige que las V16 transmitan su ubicación durante su uso en caso de avería o emergencia, no autoriza ni justifica el seguimiento continuo del vehículo en circunstancias normales. No obstante, algunos usuarios y técnicos han denunciado casos en los que ciertos modelos parecen mantener comunicación con servidores en segundo plano, incluso sin estar activados.
“El riesgo no está en la función principal de la V16, que salva vidas, sino en el diseño de algunos dispositivos que podrían estar recogiendo datos innecesarios”, explica un especialista en ciberseguridad consultado para este reportaje. “Si un fabricante geolocaliza al usuario 24/7 sin informarle claramente, no solo incumple el RGPD, sino que socava la confianza en una medida de seguridad vial crucial”.
La DGT mantiene una lista oficial de señales V16 homologadas, pero no verifica de forma pública el cumplimiento de la normativa de protección de datos. Por su parte, la AEPD ha instado a los fabricantes a adoptar el principio de “privacidad desde el diseño”, asegurando que:
- La geolocalización se active solo al pulsar el botón de emergencia,
- No se almacenen ni transmitan datos cuando el dispositivo está inactivo,
- El usuario reciba información clara, accesible y previa al uso sobre el tratamiento de sus datos.
Ante esta situación, los conductores se preguntan: ¿cómo saber si su V16 respeta su privacidad? La respuesta está en revisar la política de privacidad del fabricante y comprobar si especifica que la transmisión de ubicación ocurre exclusivamente durante una emergencia.
Mientras tanto, la AEPD ya ha iniciado inspecciones a varias marcas, y no se descartan sanciones si se confirman prácticas de vigilancia no consentida.
Recomendación para los conductores:
Al adquirir una señal V16 conectada, asegúrese de que:
- Aparece en la lista oficial de la DGT ,
- Su fabricante declara explícitamente que no geolocaliza si el dispositivo está apagado,
- Facilita un mecanismo sencillo para ejercer derechos de acceso, rectificación o supresión de datos.
En un momento en que la tecnología se integra cada vez más en la seguridad vial, proteger la privacidad no debe ser un lujo, sino una garantía.
Nota:
La geolocalización continua de millones de vehículos en tiempo real representa un activo de enorme valor comercial: desde la optimización de rutas para empresas logísticas hasta la segmentación publicitaria hiperlocal o la venta de datos de movilidad a terceros. Si algunas marcas de V16 aprovecharan su posición obligatoria para recabar datos de forma opaca —incluso cuando el dispositivo no está en uso—, estarían convirtiendo una medida de seguridad vial en un suculento negocio de vigilancia masiva.
Por eso, es fundamental que los ciudadanos estén muy atentos: revisar políticas de privacidad, exigir transparencia y denunciar prácticas sospechosas ante la AEPD no solo protege tu derecho a la intimidad, sino que frena la normalización de la vigilancia constante bajo el pretexto de la seguridad.
En este cruce entre innovación, normativa y derechos fundamentales, la vigilancia ciudadana es la mejor baliza.






